Sinopsis: Michael vivía para jugar, pero los juegos a los que jugaba, ahora son demasiado reales. Hace solo unas semanas todo era divertido, sin embargo, ahora todo es demasiado peligroso. VirtNet se ha convertido en un mundo catastrófico y Kaine es cada vez más fuerte. Además, el plan de Kaine está a punto de ser completado y la línea que separa la realidad virtual de la auténtica realidad es cada vez más confusa. Si Kaine se sale con la suya conseguirá cyber-dominar el mundo y, por lo que parece, Michael y sus amigos son los únicos que pueden evitarlo. Pero antes Michael deberá averiguar quiénes son sus amigos realmente.
Opinión: Este es el último libro de la trilogía “El juego infinito” de James Dashner. Debo decir que no me ha gustado como su segunda parte. Mi opinión sobre esta novela es parecida al primer libro de esta saga.
La historia me aburrió, no al nivel de abandonarla sin acabar la novela, pero sí de hacer lenta la lectura. Ya conocía a los personajes, por lo que como lector me pude centrar en los hechos. Pero estos no hicieron que mi inmersión en la historia sea completa. El principio de la historia no es prometedor, y no me pareció que mejore mucho a lo largo de las páginas. Hay varias situaciones innecesarias durante el desarrollo que hacen plana y lenta la novela. En el final ocurren varios eventos juntos que considero que hubiesen sido mejor desarrollados a lo largo de la historia. Pero no deja situaciones inconclusas. Lo que si debo destacar es la manera de manejar a quién es el enemigo, porque deja con la intriga hasta la mitad, o después, del libro. Y aún así se debe leer todo el libro para saber quién realmente es.
Los personajes ya son conocidos para el lector por las novelas anteriores a la trilogía. La ventaja de esta nueva novela tal vez es que conocemos mejor a personajes secundarios como Helga o incluso Gabby. Michael evoluciona a lo largo de la historia, mientras que Bryson y Sarah siento que no han mejorado mucho. Aunque estos últimos me parecen personajes inteligentes y divertidos y hacen la novela amena.
La narrativa es aceptable, pero no ha mejorado respecto a la segunda parte de la saga. Es amena y entretenida, pero no me llegó a enganchar con la historia y con los personajes de la manera esperada.
En fin, no es un libro recomendable. Tenía buenas expectativas luego de haber leído “El juego infinito: revolución”, que no se cumplieron. No es una saga que recomendaría y no me termina de convencer, sobre todo si ya se ha leído Maze Runner.
Puntaje:
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